El surgimiento de la pandemia a nivel mundial y sus restricciones de confinamiento han puesto en jaque a la gran mayoría de las empresas. Uno de los principales desafíos es dar continuidad a su operación con todas las medidas que hoy exige la autoridad sanitaria.
Bajo tal escenario, las auditorías tradicionales están dando paso a las denominadas auditorías a distancia o remotas, vía centrales de monitoreo, instalándose con fuerza en diferentes organizaciones que necesitan mantener y controlar sus procesos críticos y seguridad en las instalaciones. Nada de ello sería posible sin la correcta incorporación de tecnología como soporte fundamental para implementar este proceso.
La modalidad a distancia o remota, es la tendencia actual en Chile y en el mundo, y tiene como objetivo central auditar sin que la presencia física represente una limitante. La clave para lograr buenos resultados es que estén apoyadas a través de diferentes medios tecnológicos que faciliten las diversas actividades, entregando resultados confiables y medibles en tiempo real, a diferencia de las auditorías tradicionales.
Sus principales beneficios están orientados en otorgar eficiencia y seguridad a los diversos procesos. Además, gracias al uso de las tecnologías y metodologías ágiles, se logra realizar un mayor número de auditorías y se obtienen informes de manera más oportuna en comparación a las auditorías tradicionales.
En ese sentido, un Centro de Distribución puede auditar toda su operación desde una central de monitoreo, verificando el cumplimiento de procesos críticos, controles de acceso, coordinación con los equipos de reacción, y control de reglas / alertas preventivas, entre otros.
En Fiscalía Privada constantemente estamos en una búsqueda para entregar a todos nuestros clientes herramientas tecnológicas preventivas e integrales que les permitan revisar adecuadamente todos sus procesos, generando ambientes y espacios seguros en las empresas para disminuir las mermas operacionales y delictivas, con soluciones innovadoras, integrales, preventivas y disuasivas que resguardan la continuidad de la cadena de valor de las organizaciones.